Alergia a los pendientes: a qué se debe y cómo evitarla

Cuando un objeto que contiene este metal entra en contacto con nuestra piel, ésta reacciona de manera que nos puede irritar o picar. También provocar la aparición de manchas o granos en la zona de contacto, algunas veces puede aparecer en otras partes del cuerpo, si entra al flujo sanguíneo o por contacto con los dedos.

Esto puede ser deberse a una predisposición genética, pues hay una proteína esencial en la capa superficial de la piel, llamada filagrina, que actúa como barrera natural. Cuando esta proteína falta o aparece en bajos niveles la barrera natural desaparece, haciendo que la piel se vuelva sensible a materiales como el níquel.

Esta reacción se agudiza en verano con las temperaturas altas, dado que el sudor y la humedad la potencia.

¿No sabes con seguridad si tu alergia se debe a los pendientes? Estos son los síntomas más comunes, aunque lo mejor es que acudas a un médico.

• Sequedad de la piel, llegando a parecer una quemadura.
• Inflamación y sarpullidos en la zona de contacto.
• Picor intenso.
• Enrojecimiento de la piel.

En algunos casos, la zona puede infectarse. Los signos de una infección son el aumento del picor o enrojecimiento, pus y sensación de calor.

• Evitando joyería con níquel. Si te pones pendientes, collares o bisutería que contenga este material la reacción aparece con el contacto, por lo que si te lo quitas la reacción desaparecerá.
• Sustituir por titanio quirúrgico, oro o plata. No tendrás problema si quieres seguir llevando pendientes o colgantes, pues muchas marcas utilizamos aceros hipoalergénicos para evitar la alergia. Alguno de estos metales son el titanio, el oro o la plata.
• Esmalte para la joyería. Poner una capa de esmalte en las joyas evita el contacto directo del metal con nuestra piel, actuando como barrera. Aunque debes saber que esta solución no es tan efectiva.
• Evita llevarlo cuando hagas actividad física o deporte, al ir a playa o en la ducha. En este último caso los jabones y detergentes potencian esta reacción.
• Higiene: Puedes poner un recipiente con alcohol durante una noche y que se desinfecten, eliminando las posibles bacterias que tenga. Esta solución ha demostrado que baja mucho la reacción.

Puedes comprar pendientes hipoalergénicos en farmacias. Sólo tienes que acudir a tu farmacia más cercana y preguntar al farmacéutico por pendientes que estén hechos de acero hipoalergénico. En España hay 6.000 puntos de venta en farmacias que venden nuestros pendientes, y también en Italia, Portugal y Colombia.

También puedes pedirlos por internet para que te los lleven a casa directamente, puedes ver cómo los enviamos aquí.

Este tipo de alergia no aparece únicamente en los pendientes, pues el níquel se utiliza en muchos objetos de uso cotidiano.

En primer lugar, puede contenerse en otros tipos de joyas como colgantes, brazaletes y aros. También en otros accesorios de vestir como hebillas, cremalleras, botones y correas de reloj. Por último, el níquel se contiene también en objetos que utilizamos todos los días como monedas o llaves, así como en otros que pueden utilizarse en determinados trabajos como tizas o dispositivos médicos.

Para estos últimos casos, una solución es crear una barrera entre el objeto y nuestra piel, usando guantes o portatizas, por ejemplo.